En este trance histórico, Asturias es la región que ha observado un comportamiento más edificante. Me atrae y sobrecoge el misterio que hace germinar en una palabra acepciones tan contrapuestas y, sin embargo, tan entrañablemente consanguíneas. Parad la atención en estas dos palabras: edificante y edificación. Por un lado poseen una acepción humilde, de ejemplaridad ética. Por el otro, una acepción suntuaria, arquitectónica, constructiva. Pues bien, Asturias ha observado un comportamiento edificante porque puede servir de ejemplo a las demás regiones y porque se ha puesto al servicio de la edificación, de la reconstrucción nacional. ¿Es que los asturianos somos los únicos que no tenemos fisonomía regional? ¿Cómo no? Hasta en el infierno, como antes dije. Si la fisonomía no se puede perder, a pesar de todo... Ni tampoco inventar, por medio de la aplicación artificiosa. Cuando esto último ocurre, no es que resulte una fisonomía, sino una caracterización contrahecha, como la de los cómicos para salir a escena. De donde se deduce que es vano empeño de afanarse por conservar la fisonomía. Cabalmente, la fisonomía se conserva cambiándola con la edad, y conservarla en statu quo equivale a perderla.
Ramón Pérez de Ayala. 1931. (Regionalismo asturiano: textos para su historia. Selección de Bernardo Fernández Pérez). Los Cuadernos del Norte. Año I. Nº 4.
Fotografía: Castillete de la Mina La Camocha (Asturias). Lucía.
16 comentarios:
Me encanta el texto, impresionante. Debería ser de difusión obligatoria, sobre todo entre los inventores de patrias que tan de moda están desde hace algunos años y que pretenden hacer así el caldo gordo que los mantenga eternamente de forma poco 'edificante'.
El carbón, hilo conductor invisible entre Asturias y el sur de Aragón, un hilo bastante sufrido, por otra parte. Espero que hoy te libres de él.
Besos
Excelente aporte, en lo literario, en los sociopolítico y hasta en lo festivo (para un día como este y una noche como esta)... pero a pesar de su valor para Asturias, espero que los Magos no le dejen a Lucía el preciado mineral... Feliz Noche
Hoy es la noche del carbón. Un carbón simbólico para los "malos". En cambio, el carbón que tu propones fue el auténtico eje de las zonas mineras para poder sobrevivir y dar sustento a tantos y a tantos. La Mina y el Mar, lugares de sacrficio, tradición y tragedia pero que han forjado la verdadera identidad de regiones que hoy son especiales.
en la noche de reyes nos traes carbón del bueno, palabras lúcidas y muy apropiadas en estos tiempos... en fin, cómo eres, Lucía... feliz noche de reyes, y abrazos
Pasé a desearte un feliz año y que sepas que aunque Telefónica me obliga a estar un tanto ausente, sigo disfrutando lo que escribes cada vez que puedo... Un abrazo... Y de paso gracias por traer a mi mente gratos recuerdos asturianos...
La mina y el mar si asi veo yo desde afuera asturias, que no se si te he dicho que ya desde hace algunos años es parada obligatoria en mi vida, ese mar cantabrico, me tiene enamorada y lo añoro como a un amor que vive lejos, Asturias tiene mas identidad que muchas otras semi invenciones ...pero hoy no es dia de " carbon · como dicen tus lectores, sino de magia, efectivamente y yo te deseo la mas blanca para ti.
Besos, amiga
Me quedo con el texto, pero sobre todo con el final: "Cabalmente, la fisonomía se conserva cambiándola con la edad, y conservarla en statu quo equivale a perderla". Cuánta real sabiduría: abrumador.
Feliz día de Reyes. Feliz sueño. Un abrazo.
Como dice Alfredo, el texto debería ser de difusión obligatoria.
Asturias, tantos amigos de allí y yo sin conocerla. Lo voy a remediar este año.
Besicos, Lucía
Lucia que bonito esta tu blog, yo voy a cerrar el mio una temporada corta para cambiarlo todo. Feliz año.
Por estas tierras estoy, cuando queráis tomar un café avisadme.
Ramonet, siento que cierres el blog. Pero a la vez ya estoy impaciente por ver el nuevo, lleno de buenas y originales ideas.
Hasta pronto entonces.
Besos.
El carbón, si lo miras bien, es tan bonito como el oro.
Brillante Pérez de Ayala.
La fotografía parece de una película.Las regiones ya no te identifican nada; ni las costumbres,ni el folklore ni la arquitectura de sus casas,etc.Yo no sé si se llama globalización,incluso la palabra no está lo suficientemente definida.He viajado por pueblos que no se ven en la distancia.Como en le edad media;las ciudades estaban amuralladas.Los pueblos,ahora,lo están por casitas adosadas y naves industriales.Todos comemos más o menos lo mismo.
El carbón como el petróleo se agotan.No quiero pensar qué fisonomía se les pondrá a las gentes de un futuro próximo.
Muchos besos Lucía.
Creo que le gustaría ver el trabajo de Berndt y Hilla Becher madame, es impresionante.
Gracias por la recomendación Sr. Lenguaraz. Un trabajo muy interesante.
Besos.
Asturias es mi asignatura pendiente. Abrazos.
Entre el carbón y los diamantes no hay más que un poco de presión y tiempo (un rato, en términos geológicos).
Como sabrás, mi segundo apellido tiene allí sus raíces, aunque no desconozco cómo fue.
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